Europa guarda silencio en recuerdo a las víctimas de París
Francia, Londres, Berlín, Madrid, Roma y otras ciudades y pueblos de Europa guardaron este lunes a las 11H00 GMT un minuto de silencio en homenaje a las 129 víctimas de los atentados de París.
En Francia, donde se cumple hasta el martes un duelo oficial de tres días, el presidente del país, François Hollande, observó el minuto de silencio en la Universidad de la Sorbona “porque entre las víctimas había muchos jóvenes y maestros”. Hollande estuvo acompañado por el primer ministro del país, Manuel Valls.
En Londres, las escuelas, las empresas, el Gobierno y el Parlamento observaron un minuto de silencio cuando el Big Ben marcó las 11H00 locales. La ministra de Interior británica, Theresa May, acudió a la embajada de Francia fuertemente custodiada por policías armados.
El equipo de fútbol de Inglaterra paró el entrenamiento y las banderas ondeaban a media asta en los edificios públicos.
Frente a la majestuosa catedral de Saint Paul, en el centro de la ciudad, los turistas y transeúntes se detuvieron a observar este minuto de homenaje.
En Trafalgar Square, unas 200 personas se reunieron, algunas llorando, llevando pancartas improvisadas proclamando “Yo soy París” o “En pie contra el terrorismo en el mundo”.
En Liverpool, en el norte de Inglaterra, unas 200 personas cantaron el himno nacional francés La Marsellesa después del minuto de silencio, frente al teatro Saint George’s Hall.
En Berlín, cientos de personas de todas las edades se reunieron frente a la embajada de Francia, junto a la Puerta de Brandenburgo. Los berlineses han depositado miles de ramos de flores ante la legación en los últimos días.
A través de las ventanas de los edificios y oficinas cercanas se podía ver a mucha gente guardando el minuto de silencio, y el transporte público se detuvo para participar en el homenaje.
En Madrid, un centenar de diputados guardaron un minuto de silencio en la escalinata del Parlamento, mientras un carillón cercano interpretaba La Marsellesa.
A menos de un kilómetro de distancia, en la estación de Atocha, escenario de atentados en los que murieron 191 personas en marzo de 2004, alrededor de cincuenta personas se reunieron convocados por los dos principales sindicatos del país.
En la puerta del Ayuntamiento, en la plaza de La Cibeles, unas 200 o 300 personas guardaron el silencio, al pie de una bandera francesa a media asta y la bandera “Refugiados bienvenidos”, que lleva semanas colgando de la fachada.
“Este mensaje de bienvenida a los refugiados, tiene que quedarse ahí”, comentó una enfermera jubilada, de 68 años, Isidora Alejandra Muñoz Cejuda. “Debemos ayudar a los sirios, estoy de acuerdo en fortalecer la vigilancia, pero nosotros también conocimos el éxodo de más de 450.000 personas al final de la guerra civil”, explicó.
En Bruselas, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, dijo, después de observar el minuto de silencio, que “los aliados estamos junto a Francia, unidos en el dolor y la solidaridad”.
En Antalya, Turquía, sede de la cumbre del G-20, los siete líderes europeos asistentes -David Cameron, Angela Merkel, Matteo Renzi, Mariano Rajoy, Laurent Fabius, Donald Tusk y Jean-Claude Juncker- se sumaron al homenaje, antes de fundirse en un abrazo con Laurent Fabius, el ministro de Exteriores francés.
Finalmente, en Dinamarca, las campanas del ayuntamiento de Copenhague no sonaron a la hora en punto en que estaba previsto el silencio.